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Dejarme llevar

  • Réxica
  • 1 dic 2016
  • 3 Min. de lectura

Me he dejado llevar. Y creo que ese fue mi error en muchas circunstancias de la vida. Todo, como siempre, culpa de mis típicos sentimientos. A veces me recuerdo a Lindsay Lohan en "Confesiones de una típica adolescente", pero con sin mentiras o Sidarthur y Stu Wolf. La mejor parte de la película no la tengo en la vida.

Me dejo llevar en el hecho de que alguien extienda sus brazos hasta el hecho de que se los guarde. Me dejo llevar por las personas que me interesan, ¿toda la gente hace eso? No, la que me interesa a mí no... Bueno, a menos de que sí y yo sea quien no les interese. Pero mi egocentrismo y soberbia no me permite creerlo así.

Cada instancia de mi vida, cada relación de la índole que sea, puede ser una adaptación de cualquiera de mis películas favoritas. En este momento siento que estoy viviendo "500 days of summer", mientras paralelamente vivo un "A lot like love". Constantemente me dejo llevar, porque eso aprendí de las películas. Es que a ellos les sale todo tan bien.

¿Quién no quisiera ser Ashton Kutcher para que el amor de tu vida venga a buscarte a la boda de tu hermana creyendo que es la tuya desesperada por vos? O ¿Quién no quisiera ser Amanda Peet para encontrar a lo largo de tu vida a Ashton Kutcher que sin importar qué mujer se le cruce te elije cada vez que te mira a los ojos? De las dos, me gusta la segunda opción sobretodo la parte en la que se trata de Ashton Kutcher. Ojalá Ashton hiciera eso por mí. Se me acabarían los problemas.

Es que me dejo llevar, hasta por lo que escribo, por mis sueños, mis pensamientos, lo que creo que debería ser.

Siempre creí que debería ser exitosa en la vida, luego descubrí que no lo era, para, al fina, darme cuenta que el éxito no se basa en salir en televisión y que en la calle te pidan firmas. Entonces, supe que quiero ser reconocida, pero no me costó saber que ser reconocida no es sinónimo de exitosa. Y por eso estudio, no me garantiza nada, pero me calma. No sé a qué película se asemeje esa parte de mi vida, quizá "Almost Famous". Pero, no tanto.

Alguna vez me pregunté si todo es complicado o así lo hacemos nosotros. Constantemente tengo pensamientos erráticos o confusos, y me reitero las cosas en mi cabeza, por si yo misma no las entiendo, para dejarme en claro de manera crítica lo que me ocurre. ¿Seré la única? Siempre me pregunté eso, en todo lo que hago y pienso, ¿Seré la única? Es así como me he ganado el hecho de ser definida como rara. Todavía no me queda claro si el concepto de único es un sinónimo de raro. Pero, algún día, reiterando la idea en mi cabeza, lo sabré.

¿Todos vemos el mismo color? ¿Todos sentimos olores cuando nombran ciertas palabras? ¿Todos creemos que las matemáticas y la literatura son de colores diferentes? ¿Todos las asimilamos con el mismo color? (Por mi parte las matemáticas siempre me han parecido rojas y la literatura verde) ¿Todos recordamos sabores y los sentimos de alguna manera? ¿Todos sentimos igual el olor de la nafta? ¿O es que a los que les gusta en realidad la huelen diferente? ¿Todos entendemos el amor con una única forma? ¿O hay más de una forma de amar?

No lo sé, de nuevo, me dejé llevar.


 
 
 

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